El muy esperado Derby de la Región del País del Loira, que se celebra cada sábado durante el Jumping International de La Baule Officiel de France fue ganado por Irlanda por tercer año consecutivo. El número 9 del mundo, Shane Sweetnam, superó al jinete suizo Steve Guerdat, así como al campeón olímpico en 2012, Steve Guerdat. El Gran Premio Rolex Ville de La Baule prometía una competición de clase mundial y un espectáculo excepcional con los mejores jinetes del planeta.
Los jinetes irlandeses han dominado el Derby de la Región del País del Loira en los últimos años. Después de Shane Breen en el año 2023 y Denis Lynch en 2022, Shane Sweetnam, que competía con la yegua de 10 años, Irandole du Flot, demostró una vez más su maestría en el arte del derby, con una actuación perfectamente controlada sobre los 1.050 m y 21 obstáculos del recorrido, que combinaba elementos típicos del Salto con obstáculos naturales.
El trazado del recorrido fue diseñado por el jefe de pista, Grégory Bodo. El último en entrar a pista fue, el número 9 del mundo, que superó al suizo Steve Guerdat por 2,57 segundos, montando a Easy Star de Talma, el único otro recorrido limpio del día.
Steve Guerdat, quien ya estuvo en el podio en varias ocasiones en los últimos años, tuvo que conformarse una vez más con el segundo lugar.
“Adoro este evento, y también mis caballos”, dijo el suizo. “Muchas gracias a los organizadores y patrocinadores. Al público le encanta, y a nosotros también. Amamos este deporte porque lo disfrutamos, pero también nos gusta que la gente lo disfrute. Eventos como el Derby tienen todo lo necesario para lograrlo. Easy Star estuvo fantástico hoy, aunque necesitaba ser aún más rápido. Ya ganó el Derby de Falsterbo y fue segundo en Dinard. Pero eso llegará. Me motiva a volver y añadir esta carrera a mi lista de victorias. Disfruté mucho del nuevo recorrido, que es un paso en la dirección correcta. Estamos acostumbrados a saltar verticales y oxers, que es bastante diferente. Nos divertimos y el público también, que estuvo entusiasmado con nosotros. Fue una maravillosa tarde de deporte”.
La británica Lily Attwood, de 22 años, competía en su primer Derby, al igual que su caballo Johnnie Walker. “Fue muy divertido. Me encantó. Mi primera visita a La Baule fue una gran experiencia, y estoy en excelente compañía en el podio”.
El neerlandés Lars Kersten superó a todos los grandes jinetes y amazonas en el Prix Saur.
El Prix Saur, la segunda prueba más dotada del concurso con 110.000 €, ofreció en 2024 una última oportunidad para clasificar al Rolex Grand Prix Ville de La Baule del domingo. El joven neerlandés Lars Kersten sorprendió a todos al imponerse con Funky Fred Marienshof Z siendo el más veloz entre los nueve clasificados al desempate.
“Estoy encantado de ganar frente a una multitud tan grande”, celebró Kersten. “Mi semental solo tiene diez años. Ha competido bien en interiores, pero aún está descubriendo este tipo de grandes pistas. Espero llevarlo a las Copas de Naciones en los próximos meses. Tuve suerte en el desempate porque casi cometo un error, pero el resultado fue fantástico”.
El jinete de 24 años y número 130 del mundo superó a jinetes prestigiosos como el estadounidense Mclain Ward con Callas (2º, a dos centésimas), el irlandés Shane Sweetnam (nº 9 del mundo) con RR Combella, el austriaco Max Kühner (nº 5) con EIC Quantum Robin V, el suizo Martin Fuchs (nº 6) con Bastille, y el estadounidense Kent Farrington (nº 7) con Toulayna. El único francés clasificado, Nicolas Delmotte, con Jordan Molga M, terminó octavo.
Durante la primera manga, la británica Lily Attwood sufrió una caída en la entrada al triple con Cor-Leon vd Vlierbeek Z. Attwood se levantó rápidamente, pero el caballo tuvo dificultades para abandonar la pista durante varios minutos. Las primeras noticias del equipo veterinario, tras los exámenes pertinentes, fueron tranquilizadoras y a la espera de pruebas complementarias.
Lilly Attwood y Camille Condé Ferreira se colocaron en el centro de atención.
En el Prix GrandPrix (1,45 m), la británica Lily Attwood, que era la penúltima en salir con Karibou Horta, superó a Roger-Yves Bost, que había liderado la prueba durante mucho tiempo con Ever de Turan.
“Es mi primera vez aquí y estoy encantada de ganar una prueba en un recinto tan prestigioso y magnífico. Llevo más de cinco años con este caballo. Es rápido y respetuoso, y hoy sentí que luchó por mí”.
En las pruebas CSI 1*, Mélanie Cisneros con Gemme de Rouillac ganó el Prix La Baule Événements – Palais des congrès Atlantia (1,15 m) y Camille Condé Ferreira, con Black Knight Gem, el Derby de la Laiterie de Montaigu, que se disputó tras un emotivo homenaje a Jean-Maurice Bonneau, entrenador del equipo francés, campeón del mundo en 2002, fallecido hace unas semanas.
“Estoy encantada, sobre todo porque es el Derby de la Laiterie de Montaigu, mi patrocinador”, comentó la amazona con una sonrisa.
“No había comenzado bien la competición y no esperaba ganar el derby. Incluso dudé en tomar la salida esta mañana, pero pensé que me arrepentiría, porque el Derby es un evento extraordinario. Conozco muy bien a Black, y es propiedad de una amiga que está de luna de miel. Seguro que estará encantada”.
Ese domingo, el Gran Premio Rolex Ville de La Baule fue la primera etapa de la nueva Rolex Series.
Cincuenta jinetes soñaban con ver su nombre grabado en la placa de mármol situada en la tribuna principal del estadio, donde desde hace más de 60 años figuraban todos los ganadores. El brillante subcampeón en la Copa de Naciones Barrière, el equipo francés, esperaba suceder a Nicolas Delmotte, el último francés que ganó en 2021 con Urvoso du Roch. Para lograrlo, debían superar a rivales de altísimo nivel, como el suizo Steve Guerdat, campeón olímpico en 2012 y compitiendo con Dynamix de Belhème, su probable pareja en aquel entonces para los Juegos Olímpicos, quien impresionó ese jueves en el Prix FFE; el belga Grégory Wathelet con Bond Jamesbond de Hay; el estadounidense Karl Cook con Caracole de la Roque, vencedor la semana pasada en el Gran Premio Rolex de Roma; el cuarteto alemán formado por Philipp Weishaupt, Andre Thieme, Marcus Ehning y Kendra Claricia Brinkop, ganadores de la Copa de Naciones Barrière; el austriaco Max Kühner (n.º 5 del mundo en ese momento), entre muchas otras parejas acostumbradas a brillar en las mayores competiciones del mundo.
Primera edición de las “Étoiles du complet”.
Aquel sábado por la tarde, las gradas estaban repletas en el estadio François André. Mientras, seis jinetes de concurso completo invitados al Jumping International de La Baule competían por primera vez en este evento. Nicolas Touzaint, Astier Nicolas, Karim Laghouag, Maxime Livio, Jean-Lou Bigot y Stéphane Landois, que han hecho brillar a Francia en los mayores eventos del mundo durante décadas, se enfrentaron en un recorrido estilo derby en esta primera edición de las “Étoiles du complet”. Todo por una buena causa. Bajo los auspicios de Platinum Sellier, se organizó una rifa para recaudar fondos para la asociación HOPE, que apoya a mujeres durante y después del cáncer mediante la equinoterapia.
La historia recordará que Nicolas Touzaint realizó el único recorrido sin penalizaciones con Fibonacci de Lessac HDC, por delante de Maxime Livio (con Todd de Suzan) y Stéphane Landois (con Uh La Up de Crazy).
“Fue brillante”, dijo Nicolas Touzaint, campeón olímpico por equipos en 2004 (bronce en 2021), dos veces campeón de Europa individual y ganador de los concursos más prestigiosos.
“Al público le encantó, y para nosotros fue muy divertido. El ambiente da un impulso real. También vine a trabajar con mi caballo, y eso también fue un éxito. Saltó bien, lo cual es tranquilizador. Soy un amante de las pistas de hierba, como en el cross del concurso completo. La Baule es uno de los recorridos legendarios. El hecho de que ahora esté abierto a nosotros es estupendo. En el futuro, podríamos imaginar una prueba con algunos obstáculos direccionales para que se asemeje al cross indoor. Sería fantástico para todos”. Karim Laghouag, también campeón olímpico en 2004 y bronce en 2021, se mostró igualmente encantado.
“Es un poco como la versión La Baule del cross indoor, con mucha participación del público. Había mucha gente en las gradas, lo cual fue genial. Es bonito competir ante un público que no necesariamente sabe quién eres”.
La Baule 2024 fue sin duda una edición inolvidable, llena de emoción, talento y momentos destacados para el recuerdo.
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