En Córdoba se celebró la decimosexta edición de la Marcha Hípica del 28-F, atrayendo a cientos de participantes a las calles.

Aunque la expectación en las puertas de la Huerta de Caballerizas anticipaba un desfile impresionante de magníficos caballos y llamativos carruajes, el número de participantes en la decimosexta Marcha Hípica por el Día de Andalucía fue menor de lo esperado. A pesar de que inicialmente se inscribieron 200 jinetes y jinetes y alrededor de cuarenta carruajes, el desfile contó con menos participantes este año.

La recepción de los participantes comenzó a las 10:00 horas, y éstos llegaron de forma gradual hasta las 12:00 horas, momento en el que estaba programado el inicio de la marcha. Sin embargo, el inicio se retrasó aproximadamente 25 minutos.

Los espectadores buscaban ubicación en la avenida del Alcázar, y muchos se agrupaban en la entrada de la Huerta, ansiosos por observar y fotografiar a los caballos. Entre el público, los turistas aguardaban, muchos de ellos sin saber exactamente qué esperar, pero atraídos por la multitud.

Dentro del recinto, los caballos (algunos con las crines trenzadas y otros adornados con borlas decorativas) y los carruajes esperaban ansiosos para comenzar. Muchos jinetes y amazonas lucían sus trajes más elegantes, e incluso se unió a la comitiva una joven en un carruaje tirado por un poni.

Antes del inicio de la marcha, el presidente de Córdoba Ecuestre, Rafael Blanco, agradeció a los asistentes su participación para «llenar las calles de Córdoba de color, de caballos, de alegría en un día festivo que todos compartimos»

El portavoz de la entidad organizadora del evento señaló que «los jinetes y amazonas provienen prácticamente de toda la provincia de Córdoba, así como de Jaén, Sevilla, Málaga y Granada». Destacó la participación, considerando que muchas localidades también celebran su propia marcha hípica el 28-F, como Montilla, Montoro o Pozoblanco.