Todos sabemos que en algunas partes de la península y en algunas épocas del año, el heno que llega a las hípicas es de muy mala calidad. Colores amarillentos, llenos de ramas, pinchos o incluso palos y plásticos, secos y llenos de polvo o arena. El forraje es el mayor porcentaje de alimento que consumen los caballos diariamente, por ello debería ser de la mayor calidad posible.
Es la solución perfecta para un aporte de forraje de calidad, vivas dónde vivas y sea la época del año que sea.
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