El reconocido entrenador de caballos de carreras Bill Turner, figura clave en la hípica británica, falleció a los 78 años tras sufrir un accidente en sus cuadras de Somerset a comienzos de la semana.

El técnico, que en su juventud fue jockey, resultó gravemente herido al recibir un golpe de un caballo que le provocó una fractura en el cráneo. Pese a ser hospitalizado de urgencia, no logró superar las lesiones y murió el 14 de agosto.

Turner gozaba de gran prestigio en el mundo de las carreras, especialmente por sus seis victorias en las Brocklesby Stakes de Doncaster, la tradicional prueba inaugural de la temporada. Su última gran hazaña en esa competición llegó en 2013 con Mick’s Yer Man, montado por su nieto Ryan While, triunfo que su hija Kathy siempre consideró el mayor orgullo de su padre.

La propia Kathy confirmó públicamente la noticia en el hipódromo de Chepstow apenas hora y media después del fallecimiento, mientras uno de los caballos de la cuadra, Red Snapper, competía en memoria de Turner. Entre lágrimas, agradeció las innumerables muestras de apoyo recibidas por parte del mundo de la hípica y definió a su padre como una figura paterna no solo para su familia, sino también para todos aquellos a quienes ayudó a lo largo de sus carreras.

“Papá no era solo nuestro padre, era el de todos”, dijo Kathy, destacando el carácter cercano y generoso de Turner. “Siempre habría querido seguir en la pista, entregado a lo que amaba. Lamentablemente, fue un accidente fortuito”.

¡Mucho ánimo a su familia y allegados!