Motivado por los frecuentes problemas de desigualdad en caballos encontrados en el terreno, intenté modificar el «convencional de madera», comenta Jean-François Meyer, fundador de la marca homónima Meyer Selles cuyo taller está en Cognac, en Charente, a unos 30km de Saintes. «Aunque un poco pesada, la madera sigue siendo un muy buen material para distribuir ondas de choque y amortiguar vibraciones, ¡Un poco como un violín!».

Después de varios intentos, Jean-François se decidió por un árbol hecho de resina de lino biocompuesta. «Las fibras de lino reducen significativamente las vibraciones. Además, este material permite tener un árbol tan resistente como el de madera pero más ligero y delgado, lo que libera espacio en la silla. Sobre todo, era necesario encontrar una manera de liberar espacio al nivel de la cruz/hombros. Esta zona es muy sensible y debe ser perturbada lo menos posible», comenta Meyer.

Por lo tanto, el asiento es más « aerodinámico », sin cambiar la posición y el equilibrio del jinete. Las primeras pruebas fueron muy
concluyentes y los jinetes inmediatamente notaron una diferencia con sus caballos.
La composición incluye unos paneles que se asemejan a flotadores, para un acompañamiento suave.

Una vez desarrollado el árbol, quedaba el cuestionamiento de los paneles, también llamado acolchado. “Normalmente, la parte posterior de la silla se desprende un poco de la espalda del caballo durante los saltos, ya que nos enfrentamos a una estructura que se mantiene sólida frente a una espalda que apuntala y articulada».

Para poder ofrecer el modelo de silla de montar que acompaña el salto de una forma muy suave, hubo que rediseñar los paneles.
“La parte posterior de los paneles está montada sobre una placa de fibra, flexible pero no demasiado blanda, que se pega debajo del árbol. Con esta combinación, la montura despega repentinamente al saltar, ademas, al ser flexible no ejerce una presión excesiva sobre los
músculos sensibles de la espalda. Los paneles son móviles lateral y longitudinalmente. La silla ha sido probada durante más de tres años con jinetes profesionales de nivel internacional, con seguimiento veterinario del dorso de los caballos

¡La silla Metamorphosis es un paso más en la comodidad y el rendimiento del caballo!