Los coches de caballos han sido siempre una actividad que ha tenido mucho protagonismo sobre todo en ciudades al sur de la península. Desde Málaga, han avisado de que estos coches de caballos como actividad turística tiene los días contados en la ciudad. Esta nueva norma tiene su inicio en la propuesta que se aprobó en el Ayuntamiento en el año 2015, con la que se concedió una vigencia máxima de 20 años a las licencias de este servicio.

Actualmente, tan solo 25 de las 55 que se solicitaron y llegaron a autorizarse siguen en activo.

«En 2035 dejará de haber coches de caballos en Málaga», han asegurado desde la concejalía de movilidad, que han optado por finalmente descartar el proyecto anunciado tiempo atrás de trasladar las caballerizas de Teatinos a otro lugar.

Además, se ha criticado la actuación de los cocheros, asegurando que no hacen nada por el mantenimiento de las caballerizas, y que tampoco aportan dinero. La prueba de esto ha sido la aportación de facturas de limpieza y retiradas de basura que se han abonado desde el Consistorio.

Según Trinidad Hernández, responsable de Urbanismo, el departamento ha tenido que destinar medio millón de euros para reparar daños en el pavimento de las calles del Centro de Málaga ocasionados por las herraduras de los caballos. En una sesión plenaria, explicó que se han negado a usar herraduras de goma como se hace en otras ciudades. Durante la sesión, miembros de asociaciones defensoras de los animales intervinieron para oponerse a la continuación de este servicio en la ciudad. Además, la concejala de Movilidad agregó: «A diario, recibimos numerosas quejas de turistas en el Ayuntamiento sobre las condiciones de los coches de caballos».
«El modelo de coche de caballos como atracción turística es difícil de encajar en nuestra ciudad desde hace mucho tiempo, primero por la normativa de protección animal y segundo por la climatología y nuestra configuración urbana», ha añadido Trinidad Hernández.