El Real Club de Polo de Barcelona fue escenario de una final vibrante de la Longines League of Nations 2025, en la que Gran Bretaña se alzó con la victoria tras una actuación sólida y precisa frente a los mejores equipos del mundo.

Gran Bretaña, campeona indiscutible

El conjunto británico, integrado por Ben Maher (Enjeu de Grisien), Harry Charles (Sherlock), Scott Brash (Hello Jefferson) y Donald Whitaker (Millfield Colette), completó la primera vuelta con un total de 8 puntos y un tiempo acumulado de 209.21 segundos, y 8 puntos y 212,60 segundos en la segunda. En el Jump-Off, Scott Brash consiguió 0 puntos en 38.19 segundos.

Su regularidad y sangre fría en pista les permitió mantener el liderazgo de principio a fin, consolidando un triunfo que reafirma el excelente momento del equipo británico en la escena internacional.

Irlanda, segunda con gran consistencia

El combinado irlandés, formado por Bertram Allen (Qonquest de Rigo), Sean Monaghan (Toyger), Billy Twomey (Jumping Jack van de Kalvallei) y Michael Pender (HHS Los Angeles), finalizó con 8 puntos de penalización y un tiempo ligeramente superior en la primera vuelta (211.36 segundos). La segunda salida finalizó con otros 8 puntos y 208.71. Billy Twomey pasó al Jump-Off, donde hizo 0 puntos en 38.42 segundos.

A pesar de la mínima diferencia, Irlanda mostró una gran solidez y mantuvo la presión hasta el último binomio, confirmando su posición como una de las potencias europeas más consistentes del circuito.

Alemania completa el podio

El tercer puesto fue para Alemania, con el equipo formado por Sophie Hinners (Iron Dames Singclair), Marcus Ehning (Coolio 42), Richard Vogel (United Touch S) y Christian Kukuk (Just Be Gentle).

El conjunto germano acumuló en la primera vuelta un total de 8 puntos en un tiempo de 209.07 segundos. En la segunda vuelta sumaron 13 puntos y un tiempo total de 213.01 segundos, lo que les permitió asegurar el bronce frente a un grupo de naciones altamente competitivas.

La última cita de la Longines League of Nations 2025 volvió a demostrar el altísimo nivel técnico y deportivo del Salto internacional por equipos. La combinación de precisión, velocidad y estrategia fue clave en un trazado exigente que puso a prueba tanto a caballos como a jinetes.

Con esta victoria, Gran Bretaña cierra una temporada brillante y reafirma su posición como una de las potencias ecuestres más completas del panorama mundial.