El transporte aéreo de caballos es una práctica habitual en el mundo ecuestre, especialmente para competiciones internacionales, compraventas o mudanzas. Si bien puede parecer un proceso complejo y delicado, con la planificación adecuada y la colaboración de profesionales especializados, se puede garantizar la seguridad y el bienestar de los caballos durante el viaje.

Los caballos viajan en compartimentos de carga especialmente diseñados en aviones, los cuales cumplen estrictos estándares de seguridad y ventilación para mantener a los caballos cómodos durante el trayecto.

En la mayoría de los vuelos, ya sea un veterinario o un cuidador especializado acompaña a los animales supervisando su bienestar y asegurándose de que estén hidratados, cómodos y tranquilos durante el viaje.

Para poder volar, hemos de tener en cuenta la documentación internacional necesaria, así como contar un seguro de viaje.

Por último, hemos de entender que el proceso del vuelo no termina al aterrizar. A la llegada, los caballos pueden requerir un periodo de cuarentena, dependiendo de las regulaciones del país destino, además de un tiempo de recuperación adecuado después del vuelo para adaptarse al nuevo entorno.

Siguiendo todas las medidas de seguridad y contando con profesionales cualificados, tu caballo podrá viajar en avión de forma cómoda y segura.

-Redacción por Cristina Prado-