La equitación es un deporte que no está exento de riesgos y, por lo tanto, conviene protegerse para minimizar las lesiones que puede conllevar una caída durante su práctica.

El uso del casco está ya muy extendido y todas las federaciones hípicas lo incluyen como equipamiento obligatorio para la competición en sus normativas. Su uso es también obligatorio en la mayoría, sino en todos, los centros de hípica.

Sin embargo, el chaleco no forma parte del equipo obligatorio en ninguna disciplina (salvo en pruebas de cross), pero es desde hace tiempo una prenda frecuente entre los jinetes y amazonas más pequeños, tanto en las escuelas de equitación como en las competiciones. Ahora su uso se está popularizando también entre los deportistas adultos, pues reducen significativamente el riesgo de lesiones graves en la columna vertebral, las costillas y los órganos internos.

Un buen chaleco debe estar homologado y contar con la pertinente certificación de seguridad, que garantice que ha superado rigurosas pruebas de impacto y cumple unos requisitos mínimos. Hay certificaciones de nivel 2 y 3 que ofrecen distintos grados de protección. Las normativas más comunes en Europa son la EN13158 y, más recientemente, la NF S72-800-202.

Los diseños más habituales están fabricados con espumas de polietileno o gel que tienen una alta resistencia al impacto, y que absorben la energía y la dispersan por una superficie mayor. Es importante que el ajuste sea entallado o personalizable, para evitar que se desplace con el golpe y permitir que el jinete se mueva con libertad durante la monta.

Ahora en el mercado también encontramos chalecos airbag para equitación, que ofrecen una mayor protección al cubrir cervicales, espalda, lumbares, sacro, pelvis y tórax. Funcionan con un mecanismo de enganche a la montura que activa el inflado del chaleco cuando se libera en una caída. Este tipo de chalecos se ven cada vez más a menudo en los centros hípicos y también en las competiciones de salto profesionales, incluso en las de 5 estrellas. Afortunadamente, los deportistas están cada vez más concienciados en materia de seguridad y, sin duda, el diseño más elegante de los chalecos actuales ayuda a su buena acogida.

Foto: Hispano Hipica