El jinete debe adaptar su movimiento al del caballo, será de esta manera como se repartirán las
fuerzas que se generan por ambos en los discos intervertebrales.
Debemos tener en cuenta que cada aire tiene unos pasos diferentes y que es en el momento de
sustentación, es decir, cuando el caballo está en el aire, cuando la fuerza generada es mayor y
más se notará en la espalda del jinete.
Paso: Apenas hay sustentación, ya que se trata de un movimiento en 4 tiempos, por lo que es un
aire con muy poco impacto. En este caso la pelvis del jinete acompaña el movimiento del caballo
inclinándose de un lado a otro.
Trote: Es el aire con mayor impacto sobre la espalda del jinete, ya que tiene 2 tiempos y un
momento de sustentación en el que grupa y cruz ascienden y descienden a la vez, y por tanto,
provocan una fuerza vertical que nos lleva a necesitar una mayor amortiguación. En cada tiempo
la espalda del caballo sube y baja rápidamente, y produce un choque al bajar la del jinete que
provoca mucho impacto, un buen jinete debe mantener el contacto con la silla para conseguir
evitar este golpe y de esta manera no cortar el movimiento del caballo ni hacerse daño él.
Galope: Este aire también causa un impacto sobre la espalda del jinete, para ser exactos a nivel
cervical, pero es mucho menor que el impacto al trote. Es un aire basculante con 3 tiempos y un
momento de sustentación en el cual el caballo mueve el cuello hacia sus manos, por lo que es un
movimiento mucho más lento y más fácil de acompañar para el jinete, esto hace que la
compresión intervertebral sea mucho menor.
¿Qué podemos hacer para evitar el impacto o mejorar su repercusión?
– Fortalecer CORE y musculatura lumbar.
– Acudir a revisiones y sesiones con un fisioterapeuta.
– Estirar periódicamente
By: Equus Elite Program. @equuseliteprogram
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