Para ayudar a combatir que la crin se rompa, intenta mantenerla lavada tanto como sea posible en el invierno. Si hace demasiado frío para duchar al caballo, usa un cepillo húmedo con agua tibia y una pequeña gota de champú para ayudar a mantener baja la grasa. También ayuda usar mantas polares debajo de la manta gorda para el cuello y siempre trata de usar una manta para el cuello desmontable para que pueda lavarse fácilmente.

En el caso de los caballos con crines largas, mantenerlas en trenzas individuales evita que se rompan por roces. Es un aspecto un poco extraño, pero es efectivo.

Si no quieres lavar la crin de tu caballo, si no es lo suficientemente larga para trenzarla y si necesita un cuello en la manta, parece que diferentes marcas y tipos de mantas pueden reducir el roce. Sin embargo, los propietarios de caballos no están de acuerdo sobre cuáles, por lo que probablemente dependa del caballo y la manta.

Cómo evitar que las crines rocen con las mantas: más consejos

Algunos propietarios hablan sobre marcas con las que han tenido suerte: las mantas Horseware, que solo tienen medio cuello, y las mantas Mark Todd. Cualquiera que sea el fabricante, el consenso general es que las mantas más livianas causan menos daño, por lo que, si es posible, coloca una manta para el cuello liviana o de peso mediano, y si puedes prescindir de ella, eso resuelve el problema.

Otras formas de evitar que la crin roce con la manta incluye rociar desenredante de cola en la crin mientras el caballo lleva una manta con cuello, o tratar de frotar aceite de coco en el área afectada, lo que supuestamente ayuda a que vuelva a crecer y previene el roce inicial.