Cantabria ya cuenta con su primer centro privado de reproducción equina. ENL, ubicado en Millajo, Miengo (Cantabria) es una novedad en el mapa ganadero del norte de España y un proyecto pionero en el que la técnica y el bienestar animal se dan la mano. Detrás de este centro están Paula Sánchez-Pando y Lucía San Miguel, dos mujeres con experiencia, visión y una misma idea: hacer las cosas bien, con respeto por el caballo y cuidando de todos los detalles.

El pasado 30 de marzo, ENL abrió oficialmente sus puertas, y lo hizo rodeado de familiares, profesionales del sector y vecinos de la zona que no quisieron perderse la inauguración de un espacio que ya apunta a convertirse en referente nacional. Más de medio centenar de personas asistieron a la jornada, en la que pudieron conocer las instalaciones, recorrer la finca y comprobar de primera mano que este es un centro que nace con vocación real.

Con seis hectáreas de terreno, ENL ofrece servicios de reproducción avanzada como inseminación, vitrificación y transferencia de embriones. También atienden casos de recuperación, recría y caballos de descanso, adaptando los cuidados a cada uno, siendo en todo momento el objetivo la calma, la profesionalidad y el confort de los caballos. Prueba de su calidad es, por ejemplo, su porcentaje de éxito en inseminaciones con semen congelado, los cuales superan ampliamente las expectativas. Como dicen ellas, «no es magia: es experiencia, seguimiento y un equipo que cuida todos los detalles».

Dejando a un lado los datos clínicos, ENL se construye sobre valores que no siempre son visibles en el mundo de la reproducción equina. Aquí, cada animal es tratado como si fuera único. Todo se hace con respeto, calma y una filosofía clara de trabajo. «Lo importante no solo es el resultado, sino cómo se llega a él», comentan.

«No queríamos montar un centro más», explican, «queríamos crear un lugar donde la tranquilidad del campo y la profesionalidad del equipo dieran como resultado un entorno de confianza, tanto para los caballos como para sus propietarios».

La iniciativa de Paula y Lucía también supone la modernización del sector equino en Cantabria. Con ellas, la región suma un recurso que hasta ahora no existía, posicionándose en el mapa de la cría nacional con una propuesta de calidad, innovadora y respetuosa. ENL también promueve una forma diferente de entender la reproducción: más ética, más profesional y más humana.

Esta perspectiva ha calado entre quienes han conocido el proyecto. Todos coinciden en una cosa: ENL transmite confianza. En un sector donde los errores cuestan tiempo y dinero, encontrar un equipo que trabaje con esta dedicación es una garantía.