La tendinitis de rodilla es una lesión común en los jinetes debido a la constante flexión de la articulación y la presión que se ejerce sobre ella al montar. La postura mantenida durante largos períodos y el impacto repetitivo al trotar o galopar pueden causar inflamación en el tendón rotuliano, lo que provoca molestias y limita el rendimiento.

El dolor suele localizarse en la parte anterior de la rodilla, justo debajo de la rótula, y puede intensificarse al montar, al bajar del caballo o incluso al caminar. La sobrecarga, una técnica incorrecta o una mala alineación de la pierna son factores que favorecen su aparición. Es fundamental escuchar al cuerpo y no ignorar las primeras señales para evitar complicaciones.

El descanso y la aplicación de frío son eficaces para aliviar la inflamación en las primeras etapas. También se recomienda realizar estiramientos específicos para mejorar la movilidad, así como ejercicios que ayuden a descargar la zona. Ajustar la posición en la montura, revisar los estribos y fortalecer la musculatura de la pierna contribuye a reducir la tensión en la articulación.

Si el dolor persiste, es aconsejable consultar a un especialista para evaluar la lesión y determinar el tratamiento adecuado. La recuperación puede incluir fisioterapia y ajustes en la rutina de entrenamiento. Cuidar la rodilla permitirá seguir disfrutando de la equitación sin molestias y con mayor comodidad.

-Redacción por Cristina Prado-