Ya son tres años sin Pepe Serrano, mi Pepe.

Pepe era LO MEJOR de Jaén y el más apasionado del mundo del caballo. Por encima de eso, era mi íntimo amigo.

Este mundo nuestro crea lazos de amistades indestructibles, y así era mi relación con mi Pepe. Horas y horas de conversación, mil sevillanas bailadas y mil frases que siempre me quedarán en el hipotálamo, como “Súper Manuel, zancadilla”.

Hoy todos habláis/hablamos de Valencia, pero ¿sabéis qué es lo importante? Que la ayuda siga llegando dentro de un año y que la gente que hoy falte, siga siendo recordada el día de mañana.

Yo me acuerdo de mi Pepe SIEMPRE, y cada 4 de noviembre se me encoge un poquito más el corazón. Hoy hace tres años que partió de este mundo, y lo recuerdo como si fuera ayer.

Actuemos desde el alma, demos amor a los nuestros, nunca se sabe si mañana llegará un cáncer maldito -mi Pepe- o nos arrasará una DANA.

Nadie muere mientras los suyos le recuerdan. Te echo de menos, mi Pepe, igual que hace tres años.

Shelly Ramírez Pino