La elección de una montura adecuada es crucial tanto para la comodidad del jinete como para el rendimiento del equino. Una mala selección podría causar un un mal rendimiento deportivo, molestias para el caballo o incluso lesiones para el jinete.
Por este motivo, dependiendo del tipo de actividad o disciplina que vayamos a realizar, utilizaremos un tipo de silla u otro. Podemos diferenciar tres principales, para Doma Clásica, para Salto, o la Mixta.
La silla de montar de Doma Clásica se caracteriza por un diseño específico que favorece la posición del jinete y le otorga libertad para realizar los movimientos oportunos. Se trata de una montura de asiento profundo y cómodo para una postura estable, faldones largos y rectos que ayudan a mantener las piernas del jinete en la posición adecuada, rodilleras y tacos que aportan estabilidad y un baste corto, que permite mayor proximidad o cercanía entre el jinete y el caballo.
Las sillas de montar para Salto están diseñadas para soportar las exigencias de esta disciplina. El asiento es plano y mucho menos profundo que en la montura de Doma Clásica, que permite al jinete moverse con mayor facilidad hacia adelante o hacia atrás durante el salto, con faldones cortos y más adelantados para asegurar la posición correcta del jinete a la hora del salto. Las rodilleras y los tacos son menos prominentes, lo que facilita cambiar de posición más rápido, y el baste es más largo, para distribuir mejor la presión que se ejerce sobre el equino.
Por último, en la montura Mixta, encontramos un asiento que se encuentra entre la Doma Clásica y el de Salto, una mezcla entre la estabilidad y la libertad a la hora de montar. Esto mismo ocurre con los faldones, que están moderadamente adelantados. El baste de una montura mixta es de longitud intermedia, lo que ofrece un buen compromiso entre la proximidad al caballo y la distribución de la presión. Esta silla se selecciona para poder disfrutar de todas las disciplinas.
Como podemos comprobar, escoger la montura adecuada es un aspecto mucho más relevante de lo que imaginamos, y es esencial para poder disfrutar y aprovechar el tiempo, evitando lesiones o situaciones que puedan resultar incómodas tanto para el jinete como para el caballo.
0 comentarios