Con la llegada del verano y las altas temperaturas, es crucial prestar especial atención al cuidado de nuestros compañeros equinos. Los caballos son animales sensibles al calor y pueden sufrir de estrés, deshidratación y otras complicaciones relacionadas con las altas temperaturas. En este artículo, te brindamos 5 consejos sobre cómo hacer que tu caballo tenga un verano más llevadero

1. Proporciona sombra adecuada y refugio fresco:
Durante el verano, es esencial que tu caballo tenga acceso constante a sombra adecuada y un refugio fresco. Esto puede ser una cuadra bien ventilada o un área cubierta que brinde protección contra los rayos directos del sol. Asegúrate de que su refugio esté limpio y libre de obstáculos para que tu caballo pueda moverse con comodidad y refugiarse en las horas más calurosas del día.

2. Suministra agua fresca y limpia:
La hidratación es fundamental para prevenir la deshidratación y los golpes de calor. Asegúrate de que tu caballo siempre tenga acceso a agua fresca y limpia. Verifica regularmente los recipientes de agua para asegurarte de que estén llenos y en buen estado. Considera el uso de bebederos automáticos para garantizar un suministro constante de agua fresca.

3. Controla los insectos y las moscas:
Como bien sabemos todos, los insectos y las moscas son una molestia constante para los caballos durante el verano. Utiliza repelentes o protectores de moscas para ayudar a mantener a raya a estos insectos y proteger a tu caballo de picaduras y molestias. Asegúrate de aplicar los productos de manera segura y según las instrucciones del fabricante. Además, debes mantener una limpieza constante tanto en la cuadra como en tu compañero para evitar que se acumulen muchas moscas que puedan molestarlo.

4. Programa los ejercicios y las actividades:
Durante los días calurosos, es recomendable ajustar los horarios de ejercicio y actividades. Realiza las sesiones de entrenamiento y paseos temprano en la mañana o al final de la tarde, cuando las temperaturas sean más frescas. Evita el ejercicio intenso durante las horas más calurosas del día para prevenir el agotamiento y la deshidratación.

5. Realiza cuidados básicos:
Además de los puntos anteriores, no debes descuidar sus cuidados básicos durante el verano. Utiliza protectores solares o mantas ligeras para proteger a tu caballo de las quemaduras solares en áreas sensibles. También es importante realizar un seguimiento regular con el veterinario y mantener al día las vacunas y desparasitaciones.
Un tip que puedes incluir es la creación de helados equinos. Solo tendrás que cortar fruta, meterlo en un recipiente con agua apropiado para el congelador, y una vez esté congelado se lo puedes ofrecer como entretenimiento en las horas más calurosas del día. Recuerda no abusar de ello y no proporcionárselo todos los días.

Siguiendo estas indicaciones lograrás que tu compañero tenga un verano más llevadero, pero no olvides que, si ves algún signo preocupante en su comportamiento o estado físico, no dudes en contactar con tu veterinario.